jueves, agosto 26

invocación

Cuerpo enmudecido
titilante en las fibras
se yergue un suspiro
ella toda habla
ese crepitar
que ensordece
desde la piedra
al lodazal.

Ella mujer estremecida
entre las piedras mar embravecido
gritan sus manos
por el bien perdido.

Entre lirios negros y amapolas amarillas
sus pies se entierran en el barro
ennegrecidas sus palmas
al cielo prístinas las eleva.

inertes sus pupilas desvanecen un recuerdo
es en ese amanecer en que desdeña otro triste y solitario final.